El hombre del café

¿CAFÉ?

 

La vida del hombre del café

 

Este entrañable personajillo, al que en los años venideros, la galaxia conocería como EL HOMBRE DEL CAFÉ, vino al mundo por generación espontánea, tras el BRUTAL incendio en los famosos cafetales de Duncan Hills, Colombia.

 

El hombre del café, cuyo nombre real era Rodolfo Aurelio Luis Antonio José Rodriguez Santos Cortes Dominguez de Montoya. Tuvo una infancia dificil, desde que aprendió a andar (a los 5 años) se vio obligado a trabajar en las explotaciones cafeteras de Duncan Hills, que le vieron nacer. Allí fue visto por el famoso y pérfido narcotraficante y gordo sodomita Java Winston Heredia dos Santos, el cual le compró como juguete sesual, debido al culito prieto del joven muchacho ducho ya en esas lides.

 

Su adolescencia no fue mucho mejor, cuando su cálida voz de soprano sfogato cambio a la de Barry White tras beberse una cuba de Ron y fumarse una caja de habanos, fue BRUTALmente abandonado por el narco gordo sodomita. Así es como comenzó a vagar por todo Sur América, consiguiendo a los pocos meses un trabajo en las ferias como ayudante del famoso mago Rembrant Krueinstein Jr.

 

Fueron años muy duros, en los que el Hombre del Café (utilizando durante esa época el pseudónimo de Pussy Sussy) se vio obligado a realizar los peores trabajos del circo: alimentar/limpiar la jaula de los tigres, arrancar cabezas de gallinas a mordiscos y esquivar hachas y cuchillos no solo durante el show de Krueinstein.

 

Finalmente dejó el circo, pero desgraciadamente, debido a la necesidad de mantenerse 24/7 alerta y despierto para evitar los certeros cuchillos y/o tigres vengativos que salian a su encuentro; El Hombre del Café adquirió una dependencia al café. Necesitaba beber 42 litros diarios de su cafeínica droga, por lo que pronto dinamitó la pequeña fortuna que había conseguido acumular durante sus años como concubina de Krueinstein.

 

Poco a poco se convirtió en un ser marginado que iba a los Starbucks como quien va a las Barranquillas, para colocarse con el olorcillo del café cuando no tenía perras para una taza. Al cabo del tiempo, de forma similar a Gollum, acabó por perder el uso normal de sus facultades lingüísticas y solo era capaz de pronunciar el nombre de "su tesssoro", acompañado al principio por un "dame aargo" para luego pasar simplemente a gemir "café".

 

¿CAFÉ?

El Hombre del Café se vio reducido a vender clines en los semáforos y a comer sus propias heces para sobrevivir. Y fue así como le encontró Telahinco, que en esos momentos estaba buscando desechos humanos para su nuevo pogama del primetime. El Hombre del Café fue contratado a cambio de un cartón para dormir y una cafetera llena de café negro por semana.

 

Durante las 3 semanas que duró el pogama, el Hombre del Café, disfrutó del mundo de latón de los famosos casposos del momento, codeandose con seres tan célebres como: la Esteban, el Fieshta o Pikachu, con quien mantuvo un breve pero intenso romance.

 

Pero lo bueno siempre se acaba y de nuevo, el Hombre del Café, se vio viviendo en la calle. Sin embargo, esta vez habia palpado, saboreado y metido mano a las dulces mieles de la fama, por lo que recogió su carrito, su cartón y su litrona de café y se dirigió al aeropuerto, donde tras multiples felaciones y sodomias por parte de los pilotos, y después de chuparse todos los posos de café de las mesas sucias de la cafetería, consiguió viajar en la bodega de carga del siguiente avión. Así es como el Hombre del Café, deseoso de ir a Jollibú y vivir el Sueño Americano, voló a Italia.

 

El hombre del Café acabó encontrando un trabajo como camarero a tiempo parcial en un conocido hotel de Roma, donde arrastra penosamente su existencia sirviendo café a otros más afortunados que él. La dirección lo escogió para atender a los clientes extranjeros, debido a sus limitaciones en el uso del lenguaje y por ello vaga por el comedor ofreciendo amablemente: "café". Este trabajo resultó sumamente beneficioso para este yonkie de la cafeína, ya que le permitía un acceso directo a todo el café de la máquina cafetera y, sobre todo, un horario flexible para poder trabajar en su auténtica vocación: ser stripper en un bar de camioneros a las afueras de la ciudad.

 

Si alguna vez pasaís por la zona no dudeís en ir a visitarle, responde al nombre de Priscila y os hará una buena oferta si le ofreceís a cambio una jarra de Duncan Hills Coffee.

 

¿CAFÉ?

 

¿CAFÉ?


"Do you folks like coffee?
Real coffee?
From the hills of Colombia?

The Duncan Hills will wake you
From a thousand deaths
A cup of Blackened Blood
(Die, die)
You're dying for a cup

Guatemalan blend
Ethiopian
French vanilla roast
(Die, die)
You're dying for a cup

Prepare for ultimate flavor
You're gonna get some -- NOW!
And scream for your cream

Duncan! Hills! Duncan! Hills! Duncan! Hills! Coffee!"

¿Sabías que...

… en su última visita a Colombia arrasó 42 cafetales y siete campos de coca?

… desde que se tropezó con nuestro héroe, Yorch Cluni no ha vuelto a acercarse a la máquina de Nespresso?

… una vez le dieron descafeinado y sufrió un paro cardiaco?

 

... aunque no nos gusta el café se lo pedíamos solo para oirle y reirnos a sus espaldas?

 

¿CAFÉ?