Crítica: Asesinos natos (1994)

 

Por John Karra

Título original: Natural Born Killers

 

Dirección: Oliver Stone

 

Guión: Quentin Tarantino (esperad, no empecéis a chuparos las pollas todavía), David Veloz, Richard Rutowski, Oliver Stone.

 

Intérpretes: Woody Harrelson (un romántico de los que ya no quedan), Juliette Lewis (muñequita de risa reconfortante... HAHAHAHAHA), Robert Downey Jr. (defensor de la verdad), Tommy Lee Jones ("¡¿Por qué me tiene que pasar esto a mí?!"), Tom Sizemore ("Ooh, sí, nena, ¿te parezco sexy?").

 

Crítica:

 

¿Qué mejor forma de pasar una tarde triste de sábado lluvioso que con una historia de amor? Sí, es una de las películas más románticas que he visto últimamente. Mickey y Mallory Knox son dos amantes procedentes de felices y tradicionales hogares estadounidenses que, tras conocerse en uno de los encuentros más hermosos que veréis en la historia del cine, se embarcarán en un repentino y apasionado matrimonio en cuya luna de miel dejarán huella allá por donde pasen a lo largo de la geografía norteamericana que atraviesa la ruta 666. En su viaje conocerán la preocupación de los políticos y agentes de policía estadounidenses por la seguridad de sus ciudadanos y el afán de la televisión por llevar la verdad a su público; pero sobre todo, descubrirán el poder del destino. Lo que viene siendo una película para pensar, para extraer un mensaje.

 

Dirigida por el (según Tom Tucker, loco) cineasta Oliver Stone, “Asesinos Natos” es una versión muy reescrita de un viejo guión del tito Quentin, que acabó por decir que después de tanto cambio la película no tenía nada que ver con él; pero es que queda muy bien poner el apellido Tarantino en los créditos, así, bien grande. Aunque con la impresión que da desde el principio, se puede decir que es como coger unos cuantos personajes de “Pulp Fiction”, meterlos en unas escenas de “Miedo y Asco en Las Vegas” y proyectarlas con muchos filtros de colorines manejados por un cámara a tope de c-c-c-yeah, yeaaaah! En fin, una delicia para los epilépticos. Seeeh, podría haber sido una auténtica peli de culto si la hubiera hecho Tarantino, pero para ser del patriota que cagó perlas como “World Trade Center” es una psicodelia de los ’90 bastante cachonda.

 

No me voy a dejar fuera la música, nooooo… y menos si la firma mi admirado Trent Reznor: tres temas de Nine Inch Nails mezclados con otros de mis grupos más macarras preferidos como Patti Smith, L7 y hasta Marilyn Manson en una banda sonora presidida por dos temazos de Leonard Cohen y en la que también hay cabida para respetables como Bob Dylan y Diamanda Galás. La única pega que le pongo son los raps, pero es que en cualquier película americana que se precie tiene que haber una escena de cárcel llena de negros con un fondo de hip-hop, cómo no (lo que pasa es que en el 94 el Tito MC no había alcanzado aún el estrellato y tuvieron que conformarse con Dr. Dre).

 

Podría ser una opción decente para un congreso, aunque puestos a ver gore del divertido más nos vale hacernos con una buena colección de serie B de la de verdad.

 

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Comentarios: 2
  • #1

    Repolocho (lunes, 14 junio 2010 12:02)

    Woody Harrelson... ¿¿¿¿¿romántico?????

  • #2

    John Karra (lunes, 14 junio 2010 15:18)

    Tú échale un vistazo y luego me cuentas.