Crítica: Ghost Dog. El camino del samurai (1999)
Por Mace Windows
Título original: Ghost Dog. The way of the samurai.
Dirección: Jim Jarmusch.
Guión: Jim Jarmush.
Intérpretes: Forest Whitaker, John Tormey, Cliff Gorman, Dennis Liu, Frank Minucci. Por nombrar algunos, porque ninguno vio mucho más allá de esta peli aparte de Forest Whitaker. Véase su éxito en Negros, la película.
Crítica:
Cuidado, todo ese público que no traga el mundo otaku y que teme sus pelis no tiene que huir de esta, me temo que no es un ejemplo claro de ninguna clasificación esclarecedora. Eso sí; si como yo te pirras por un buen drama nipón esta te encantará. Y si también te gustó el asunto de la mafia, esta es tu película favorita. A esto hay que sumarle la fantástica banda sonora, a cargo de RZA. Aparte de rapero, músico con talento. A la altura de otras bandas sonoras suyas, como por ejemplo Kill Bill.
Sobre el director, no mucho que contar porque apenas le conozco. Si apenas le conozco, es por algo. Encima me he echado un ojo a su página. No recuerdo el título de ninguna de las pelis de su escasa obra: por algo será. Pero ojo, que con esta película ha creado algo.
Como decía, en esta película no hay mucho de samurai, nada más que un gran negro haciendo de tal. Vive en los noventa en una gran ciudad estadounidense; rodeado de chorizos, gánsters y demás escoria. Vaya mezcla, ¿eh? El amigo en cuestión es Forest Whitaker, un tío afable, carismático, de esos que tal vez no recuerdes el nombre pero tu corazón se enaltece al verle y dices "coño, es este tío". Exacto, ese moreno grandullón con un ojo un poco pá yá.
Las cosas están así: un grupo de quiere-no-puede-ser-gansta que pasean por la calle ven a un negrito amante de la cultura japonesa, vistiendo una camiseta con hiragana. -"Eh, vamos a patear el culo a ese hermano" -"¿Y cuándo vamos a papear ese fried chicken" -"Cuando le machaquemos y le robemos la bici". Cuando ya iban a despacharle, resulta que un mafioso de los de verdad (italoamericano), pasaba por allí, y como le acababan de rayar el coche y estaba muy cabreado pensó "mira esos negratas, voy a hundirles la cabeza", así que les dio con palo y salvó al otaku. Años después, el muchacho en cuestión encontró a su salvador, sin conocer ningún dato de este. Comenzó a hacer trabajos para él (encargados a su vez por sus mafiosos superiores), convirtiéndose en un asesino de primera.
Todas las actuaciones de "Ghost Dog", el protagonista, son llevadas a cabo siguiendo el código samurai, el Hagakure (aunque deberíamos matizar mucho este libro, ya no es totalmente representativo ya que la ideología samurai se trasmitía oralmente, y este escrito es de un tipo que no pintaba mucho y que blablabla, y blablabla... peeero vamos, que el "libro del samurai" da pelas, así que se comercializa con ese nombre). Aislado del mundo moderno en cierto modo, sumido en sus pensamientos, en la sabiduría de nuestros antepasados y a la cultura escrita; renuncia a la tecnología y al contacto humano no estrictamente necesario o enriquecedor. Es por ello que tan solo entabla amistad con un vendedor de helados que ni siquiera habla su idioma (francés tuvo que ser) y una niña que comparte sus gustos literarios.
Este férreo culto le hace llevar una senda recta de frialdad, extrema efectividad e inquebrantable sumisión a su maestro, el hombre que le salvó, pese a que sus órdenes le vengan de los mafiosos que entran en conflicto con su "camino" y le lleven a la desgracia. Todo ello le lleva hacia su destino final, en todo momento asumido por el buen samurai. (Si te comes ese cubo de fried chicken tú solo, engordas).
Durante la película podemos observar las similitudes y diferencias entre dos culturas tan dispares. Por un lado el milenario camino del samurai; y por el otro... el milenario camino del mafioso. Conflictos entre diferentes códigos de honor y lealtad, sabiduría ancestral y conflictos modernos. El fracaso de la pureza frente al triunfo de la injusticia. Preparáos para ver más allá de los tiroteos y de los chistes racistas. Una de mis películas favoritas, que puede ganarse un hueco en cualquier podrido corazoncito.
Para los que les sabe a poco la crítica, os dejo aquí un par de minutos. Atemporales, no desvelan spoilers. Resume en sí la idea de la película; tal vez mi escena favorita.
-No hay muchos de estos cabrones por aquí; así que si ves uno, te lo cargas, como hay Dios.
-¿Por eso los matas? ¿Porque no hay muchos?
-¿Sabes? Tampoco hay muchos negros por aquí...
[...]
-En algunas culturas antiguas los osos eran considerados iguales a las personas.
-Ya no somos una cultura antigua.
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Keruin (domingo, 21 marzo 2010 22:51)
Hey me gusta tu critica! ajaja
buena peli!
saludos dismaníacos!
Mace Windows (lunes, 22 marzo 2010 12:50)
Woo, ¡me place que te plazca, intempestivo!